jueves, 23 de diciembre de 2010

MAGISTERIO: UNA CARRERA TAN DIGNA COMO LAS DEMÁS

 Hoy en día nuestra carrera está infravalorada, incluso compañeros de otras carreras piensan que magisterio debería ser un módulo, y yo pienso…. ¿Nos hemos vuelto locos? Está en nuestras manos la educación de los niños que construirán nuestra futura sociedad.

Es verdad que cantamos, bailamos, coloreamos, es más hasta nos disfrazamos pero sobre todo aprendemos, y aprendemos no sólo conceptos  que vienen en los libros, También aprendemos a reír a llorar, a compartir, a elegir… ¿Quién no se ha quedado sin dormir una noche porque tenía que hacer mucho trabajo? ¿Quién no ha pasado horas esperando en las tutorías de Sabatini, en la biblioteca, en las ciénagas? ¿Quién no ha comido en el edificio 10 con un taper de su casa? 

Me gustaría exclamar fuerte unas bellas palabras que escuché:

¿Dónde más podría atar lazos al pelo, ajustar cinturones y ver un desfile de modas a diario?
¿En qué lugar olvidaría mis penas porque tengo que atender tantas travesuras, concurrencias y corazones afligidos?
¿Dónde más podría guiar en la escritura de las primeras letras de una manita que quizás mañana escriba un libro?
¿En qué lugar recibiría  el regalo de tantas sonrisas?
¿Dónde me harían un retrato gratis?
¿En qué lugar mis palabras causaran tanto asombro?
¿En qué lugar cuando faltas  te reciben con los brazos abiertos?
¿Dónde puedes ver en primera fila la ejecución de grandes obras?
¿Dónde conservaría el alma joven sino fuera en medio de un grupo cuya atención es tan efímera que siempre debo tener una sorpresa?
¿En que sitio derramaría lágrimas porque hay que dar por terminado un año?

¡Que grande es trabajar con niños, por eso quiero ser maestra!

No escribo este artículo para dar ninguna lección, sólo quiero aportar mi granito de arena para concienciar a las personas lo valiosa que es esta profesión y el reto al que nos comprometemos los que escogemos esta carrera.

Quiero dedicar estas palabras a todos los docentes y a la clase de 3º de Educación Primaria, ya que ayer fue el último día de clase, y sé que este no es el final, sino el principio del camino, pero esta vez con una gran diferencia, tendremos que aprender a caminar solos.



Somos la última promoción de la diplomatura, la promoción de las dudas. La gran mayoría acabamos y no sabemos que va a ser de nosotros, si nos harán la homologación famosa o no. Hoy por hoy, tenemos muchos miedos y nos surgen muchas preguntas, pero sé que todos tenemos la misma ilusión, en un futuro poder ejercer la docencia.

Quiero dar las gracias a todos los profesores que me han enseñado y aportado grandes valores  a lo largo de estos tres años, pero sobre todo, quiero dar las gracias a nueve compañeros, ya que juntos hemos sacado los trabajos adelante, las clases se hacían más amenas…y porque gracias a ellos he aprendido a ser mejor persona.

Esther Gómez García (3º Ed. Primaria)

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Soy una compañera y estoy totalmente de acuerdo con Esther, estamos totalmente subestimados y creo que no nos lo merecemos y que nos deberían de tratar como a otros compañeros que estudian otras carreras.
    Por otro lado decir a Esther que si ella con nosotros ha aprendido a ser mejor persona, nosotros con ella también.
    Esther gracias por ser como eres...

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